Después de 30 años de dar servicio en Rusia, McDonald’s dejará dicho país a causa de la invasión que su ejército comandado por el presidente Vladimir Putin cometió el pasado mes de febrero a Ucrania.
Luego de que el pasado mes de marzo comunicara su decisión de cerrar todos sus puntos de venta de hamburguesas y demás en aquella nación, la empresa estadounidense dio un batacazo final al tomar la decisión de salirse por completo de Rusia.
«La crisis humanitaria causada por la guerra en Ucrania y el precipitado e imprevisible entorno operativo, han llevado a McDonald’s a la conclusión de que la continuidad del negocio en Rusia ya no es sostenible», dijo la compañía.
Esto significa que McDonald’s pretende vender los 850 restaurantes que tenía edificados en Rusia, en donde emplea a 62 mil personas.
De hecho, el CEO de la empresa, Chris Kempczinski, señaló que fueron precisamente sus empleados rusos los que generaron que la decisión fuera dura de tomar, no obstante, recordó que es imposible ignorar la crisis humanitaria provocada a raíz de la invasión.
Vale hacer mención, que la empresa aseguró que los empleados seguirán cobrando su sueldo hasta el cierre de cualquier transacción, además les dio la facilidad de poder ser contratados por el negocio del posible comprador.
Por otro lado, se indicó que mantener a McDonald’s en Rusia “no es sostenible ni es consistente con los valores de la marca”.
«Algunos podrían argumentar que brindar acceso a los alimentos y continuar empleando a decenas de miles de ciudadanos comunes es seguramente lo correcto. Pero es imposible ignorar la crisis humanitaria provocada por la guerra en Ucrania”, añadió Kempczinski.
De acuerdo con Reuters, el abandonar Rusia dejaría a McDonald’s un cargo no monetario aproximado de mil 300 millones de dólares.