Al menos 33 personas murieron y 18 siguen desaparecidas a causa de las recientes tormentas en Beijing, las más intensas jamás registradas en la capital china, según un nuevo balance difundido por las autoridades de la ciudad.
El número de muertos, en su mayoría por inundaciones y derrumbes de edificios, casi triplica el balance ofrecido anteriormente por estas tormentas que dañaron fuertemente infraestructura y anegaron importantes zonas de la ciudad.
El vicealcalde de Beijing, Xia Linmao, en una rueda de prensa, afirmó:
“Quiero expresar mis profundas condolencias a quienes murieron haciendo su deber y a las desafortunadas víctimas”.
Los fenómenos meteorológicos extremos se sucedieron en China en las últimas semanas, con olas de calor extrema y fuertes lluvias que provocaron inundaciones en el norte del país.
El viernes, el Ministerio de Gestión de Emergencias dijo que 147 muertes o desapariciones registradas en el último mes fueron causadas por desastres naturales. De ellas, 142 se debieron a inundaciones o desastres geológicos.
En la provincia de Hebei, vecina de Beijing, 15 personas murieron y 22 están desaparecidas. Y en la de Jilin, en el noreste, el domingo se informó de 14 fallecidos y un desaparecido.
Más al norte, en la provincia de Heilongjiang, decenas de ríos alcanzaron niveles de alerta en su caudal en los últimos días, dijeron los medios estatales.
En semanas recientes, millones de personas se vieron afectadas en todo el mundo por fenómenos meteorológicos extremos y largas canículas, unos acontecimientos que se ven acentuados por el cambio climático, según los científicos.