La candidata presidencial de la coalición entre el PAN, PRI y PRD, Xóchitl Gálvez, elevó sus críticas contra el modelo de la cuarta transformación y al advertir que en las urnas “se determinará la vida o la muerte de la democracia mexicana”, calificó la contienda el electoral como un “referéndum sobre nuestro orden constitucional” en el que también se debate “la sobrevivencia misma de nuestro régimen democrático”.
Gálvez acudió esta mañana a la reunión anual de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), al ser la única de los candidatos presidenciales que aceptó la acudir. Aunque recorrió la mayor parte de los estand de la Expo ANTAD, su presencia pasó inadvertida para la mayoría de los asistentes que a unos cuantos metros seguían su rutina normal en este evento. En su paso por los pasillos de las instalaciones de la Expo Guadalajara, se escucharon un par de “tímidas” porras para la candidata.
En la inauguración de la Expo ANTAD se detalló que hicieron la invitación a las dos candidatas y al candidato presidencial, pero los otros dos no pudieron incluirlo en su agenda. La llegada de Gálvez causó sorpresa a más de alguno de los expositores que no esperaban su participación.
Sin mayor preámbulo, la abanderada de Fuerza y Corazón por México comenzó su discurso con críticas al gobierno federal y a la candidata morenista, Claudia Sheinbaum.
“Esta no es una elección normal en donde compiten dos proyectos políticos y dos candidatas a la Presidencia. Lo que está en juego en las elecciones a la Presidencia y el Congreso es un referéndum sobre nuestro orden constitucional. Lo que está en juego es la sobrevivencia misma de nuestro régimen democrático. El próximo 2 de junio la voluntad de las urnas determinará la vida o la muerte de la democracia mexicana”, expresó.
Para demostrar que “no exagera”, conminó a analizar las recientes iniciativas de reforma constitucional enviadas al Congreso de la Unión por el Ejecutivo federal, y que, dijo, “su candidata Claudia Sheinbaum acató como su plan de gobierno”.
Amagó que su planteamiento puede “quitar el sueño”, pero llamó a imaginar un escenario con “un México donde la Suprema Corte está compuesta por personas totalmente sometidas a las presiones de los partidos políticos y los ciclos electorales. Imaginen un Congreso, sin pluralidad o diversidad de opiniones, donde un solo partido tiene la mayoría constitucional, no por una legislatura de tres años, sino por el resto de nuestras vidas. Imaginen una democracia sin el INE y un gobierno sin el INAI. Imaginen una elección sin árbitro y una burocracia sin ninguna obligación de transparentar presupuestos o rendir cuentas”.
Tras ello, aseveró que los derechos políticos, la pluralidad en el Congreso, la autonomía del Poder Judicial y la transparencia de las acciones del gobierno, estarán en juego el 2 de junio.
Durante su mensaje no surgieron porras ni aplausos; tampoco abucheos ni muestras de rechazo de los asistentes que, en su mayoría eran representantes de comercios que acudieron en busca de cerrar tratos con proveedores de distintos productos.
Ante ellos, la hidalguense les pidió “defender con su voto los principios de vida, verdad y libertad” y alertó que también estará en juego en las elecciones el valor de la prosperidad. Al apuntar que el Presidente de la República “ataca” a las clases medias, remató que “quien ataca la clase media, ataca a mexicanos y mexicanas que tienen sueños de prosperidad. Atacar a la clase media es atacar a las personas de esfuerzo, a las personas de trabajo, a las personas que luchan todos los días para salir adelante”.
A la vez, recalcó los casos de robos y extorsión que han denunciado transportistas, y que aseguró pasan a la luz del día.
Luego de su mensaje, y sin esperar a los demás participantes que acudieron a la inauguración, Gálvez se dirigió a los estands. Mientras algunos de los encargados de los locales la reconocieron de inmediato y se apresuraron a invitarla para tomarse una fotografía, otros llegaron a preguntar el motivo de que se generara una aglomeración que destacaba por las cámaras de video y fotografía. “Es una candidata”, dijo uno de los asistentes cuando otro más preguntó de quién se trataba.
A unos cuantos metros, la mayoría continuó con la gestión de contratos y ventas, sin advertir la presencia de la abanderada de la oposición.