La Fiscalía General de la República (FGR) pidió ayer una pena de 21 años de prisión a Rosario Robles, por presuntamente haber sido omisa ante los desvíos por más de 5 mil millones de pesos que llevaron a cabo sus subordinados en la Sedatu y la Sedesol, en el caso de la «Estafa Maestra».
El ejercicio ilícito del servicio público es sancionado con hasta 7 años de cárcel, pero de acuerdo con la acusación formal presentada ayer en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur, la dependencia acusa a Robles de dos cargos por este mismo delito.
Uno por la afectación ocasionada a la Sedesol, del 1 de diciembre de 2012 al 26 de agosto de 2015, y otro por la causada en la Sedatu, del 27 de agosto de 2015 al 30 de noviembre de 2018.
Es decir, 14 años de prisión, más otros 7 años por tratarse de un delito continuado, argumentó la Fiscalía. Con información de Abel Barajas/Reforma