La presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra, compareció este miércoles ante el Senado de la República a tres años de su nombramiento.
Ante el Pleno de la Cámara Alta, Piedra Ibarra sostuvo que el organismo a su cargo ejerce una autonomía que está al servicio del pueblo y que ahora las recomendaciones no se negocian y que no se ha dejado de lado un solo hecho violatorio comprobado de cualquier autoridad.
Lo puedo decir con la frente en alto, la CNDH hoy no trabaja para una minoría, está al servicio de todo el pueblo, aunque por ello tengamos que pagar el costo“, manifestó.
La funcionaria dejó en claro que nunca ha intentado eludir al Senado y que, por el contrario, ha buscado entablar un diálogo constructivo.
Ríspido encuentro con la oposición
La comparecencia de Rosario Piedra estuvo marcada por las duras críticas de legisladores de oposición, quienes criticaron su gestión al frente del organismo y su omisión en temas como la militarización del país.
Una de las críticas más difundidas fue la de la senadora priista Claudia Anaya, quien criticó a Piedra Ibarra por la recomendación que hizo al INE.
Deje de violar la Constitución, dignifíquese, emita todas las recomendaciones que sean pertinentes contra hechos del pasado, pero también todas las recomendaciones a las que está obligada desde que tomó protesta”, exigió.
Por otra parte, las senadoras panistas Xóchitl Gálvez, Kenia López y Lilly Téllez señalaron a Piedra Ibarra de ser “empleada” del presidente Andrés Manuel López Obrador con pancartas color guinda.
Rosario Piedra defiende al Ejército
En la comparecencia, la titular de la CNDH aseguró que la estrategia de seguridad en México está “dando resultados” y sostuvo que las violaciones a los derechos humanos por parte de militares se están reduciendo.
Durante tres años han repetido que vivimos una crisis desbordada en los derechos humanos, que las Fuerzas Armadas son las principales violadoras y que la Guardia Nacional no sirve para nada. Las cifras los desmienten y, como los desmienten, entonces dicen que no existe la CNDH y que no hace absolutamente nada”, argumentó.
Piedra Ibarra aseguró que “la pretendida crisis inmanejable solo existe en un discurso con sesgo partidista que busca beneficios electorales”.