Una potente tormenta invernal causó estragos en el sur de Estados Unidos el jueves, con nieve a lo largo de la frontera con México. Una persona murió y otras sufrieron heridas en una docena de estados. Una y otra vez los rescatistas tuvieron que salvar personas atrapadas en autos inundados y se vio a una persona desaparecer en un arroyo crecido cuando se hundía un auto.
La tormenta arrancó techos en una amplia franja de Mississippi. Destruyó casas móviles en Alabama, provocó un alud de lodo en Tennessee e inundó viviendas en localidades ribereñas en los Apalaches.
En el condado de Harlan, Kentucky, dos casas móviles se fueron flotando después de que los rescatistas salvaron a sus ocupantes, y decenas de personas tuvieron que dejar sus hogares al crecer las aguas.
Llovía sobre un largo tramo de árboles destruidos y cables de electricidad caídos desde Luisiana hasta Virginia. Se cancelaron las clases en diversos estados a medida que llegaba la tormenta.
Una persona murió y otra resultó herida cuando los ventarrones destruyeron dos casas móviles cerca de la localidad de Demopolis, Alabama, informó el servicio meteorológico. Los caminos estaban cubiertos de trozos de madera, material aislante, árboles destruidos y cables retorcidos. No estaba claro si pasó un tornado por el lugar.
Horas antes, el clima obligó a suspender la búsqueda de un vehículo que desapareció el miércoles con una persona en su interior, en el parque estatal Buck’s Pocket en el norte de Alabama.
En muchos lugares las autoridades pidieron a la gente que no maneje si no se ve el pavimento.
Un posible tornado derribó árboles y cercas en Helena, un suburbio de Birmingham, dijeron las autoridades, y las playas de estacionamiento estaban inundadas.
En Nueva Orleáns, debido a los fuertes vientos, colapsó el andamio alrededor de un hotel, que aplastó varios automóviles y causó heridas a una persona. Cayó granizo en el distrito financiero de la ciudad y los vientos reventaron dos puertas de vidrio.
Las calles alrededor de la Universidad de Alabama en Tuscaloosa se inundaron y la zona de Atlanta quedó empapada por torrenciales aguaceros, aunque las temperaturas ascendieron a 18 grados centígrados (65 grados Fahrenheit).
Nevó en El Paso, Texas, un fenómeno inusual para esa zona fronteriza con México. Pablo Salinas, un cartero, informó que cayeron unos 10 centímetros (4 pulgadas) de nieve pero que para el mediodía ya se habían derretido.