Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México durante el gobierno del expresidente Felipe Calderón (2006-2012), se declaró hoy aquí inocente de los cargos que se le imputan y fue enviado de vuelta a la cárcel, mientras sus abogados negocian una fianza.
«La acusación de García Luna ha terminado. Se declaró inocente y fue enviado de vuelta a la cárcel mientras sus abogados trabajan en la negociación de la fianza», adelantó Alan Feuer, periodista de The New York Times.
Desde su cuenta de Twitter, Feuer reportó que los fiscales afirmaron que buscarán resolver el caso sin ir a juicio, «lo cual es rutinario en asuntos criminales», pero un tanto improbable ahora que García Luna se declaró no culpable de ninguno de los tres cargos en su contra.
Según trasciende en estos primeros minutos tras la comparecencia del exfuncionario, la próxima audiencia quedó programada para el 21 de enero.
Feuer agregó que no hubo nada nuevo respecto a los cargos imputados previamente y que los fiscales pidieron mantener tras las rejas a García Luna debido a su «gran fortuna personal», su viaje reciente a México en noviembre de 2019 y sus conexiones con funcionarios mexicanos de alto rango, todo lo cual eleva los riesgos de que se fugue para huir del proceso.
García Luna fue arrestado el 9 de diciembre en la localidad texana de Grapevine bajo acusaciones de corrupción, narcotráfico y falsas declaraciones. Se le considera ligado a una de las organizaciones mexicanas de narcotráfico, el Cártel de Sinaloa.
Tras su detención, fue recluido en una cárcel de Texas, pero el pasado 17 de diciembre se le negó el derecho a libertad bajo fianza y se ordenó su traslado a Nueva York, donde está siendo juzgado para determinar su culpabilidad o no de cada uno de los cargos que pesan en su contra.